martes, 14 de enero de 2025

UNA HISTORIA DE COLUMNAS


𝙐𝙣𝙖 𝙝𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙖 𝙙𝙚 𝙘𝙤𝙡𝙪𝙢𝙣𝙖𝙨...⁣

El famoso fortachón de Sansón fue capaz de demostrar su valía y su fuerza durante muchos episodios bíblicos en su biografía, pero si hay uno de los más famosos es el relato de su propia muerte. ⁣

Sansón ciego, derrotado, y siendo el entretenimiento de sus enemigos, decidió hacer un último acto heroico, derrumbar las columnas y morir con sus enemigos. ⁣

Sansón vivió una vida donde las columnas que sostenían, su vida se tambalearon entre el pecado y el manejo de su unción, fue una vida dividida e indecisa. ⁣

Pero como nos cuenta en Jueces 16:29,  al final Sansón decidió acabar con sus enemigos rindiéndose. Poner sus últimas fuerzas sobre las columnas, era un símbolo de querer acabar con su pecado, sus malas decisiones, su desobediencia, ... todo aquello que se había hecho firme y sólido en él, pero no tenía la base correcta. Sansón descansó toda su vida sobre las columnas equivocadas con todas sus fuerzas y murió sobre ellas. ⁣


Esto puede ser una buena enseñanza para nosotros. Echar nuestro peso, sobre lo que no está bien cimentado en tu vida, solo hará que todo ello caiga sobre ti y mate nuestra vida espiritual. Con nuestras fuerzas, solo conseguiremos destruirnos a nosotros mismos.  No te dejes morir con tus enemigos, Dios puede darle un rumbo diferente a tu destino. ⁣

Ahora pregúntate, ¿sobre qué descansa tu casa? ¿en qué columnas descansa tu vida, tus pensamientos, tu familia, tus decisiones...? Si la respuesta es Dios, tu casa seguirá firme; pero si por lo contrario las columnas de tu casa y tu vida descansan sobre firmamento variable y poco seguro, por mucha fuerza que le pongas solo podrás  hacer que todo se derrumbe. ⁣

En la Palabra, en el Salmo 75:3, el Señor nos dice que aunque todo a nuestro alrededor se derrumbe: los principios, los valores, la familia, la moral, los países...Él es el ÚNICO capaz de sostenernos sin que nuestra casa se derrumbe. ⁣

Decide hoy echar todo peso que te asedia sobre las manos más firmes y seguras, que son las de Cristo (Hebreos 12:1). Deja que ÉL sostenga tu vida y puedas construir un hogar con columnas descansadas en Dios y su completa seguridad.